Los determinantes y pronombres interrogativos siempre llevan tilde. Cuando la interrogación o la exclamación es directa esta lleva signos de puntuación (¿?/¡!) y al ser más evidente su sentido, no nos cuesta tanto acordarnos de la tilde. Es en los enunciados indirectos (sin signos) donde tenemos más dificultad para añadir el acento gráfico.Vamos a elaborar un breve texto en el que todas las oraciones lleven algún tipo de determinante y pronombre interrogativo. Por ejemplo:
Alguien me observa, lo noto. No sé dónde está apostado, pero tiene que estar muy cerca. Me pregunto quién será y qué verá en mí, qué le llamará la atención de mi persona. ¿Desde cuándo estará mirándome? Quizá se pregunte cuántos años tengo, cómo es mi vida en la ciudad, cuál es mi color favorito o por qué estoy sentada aquí. Lo curioso es que yo me pregunto lo mismo.
Ahora te toca a ti.
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